Tratamientos de conducto: empastes superpotenciados
Los tratamientos de conducto por lo general se hacen en dos visitas. En la primera visita, se saca la raíz enferma y se limpia la infección. Luego se cierra el diente con un empaste temporal.
Cuando el diente haya sanado, debe regresar para una segunda visita. Se toman radiografías para confirmar que la infección desapareció por completo, y luego se sella el diente permanentemente.
¿Los tratamientos de conducto duelen?
Por lo general, son un gran alivio porque detienen inmediatamente el dolor causado por la infección.
Durante el procedimiento, se adormece el diente y la zona que lo rodea, como lo haríamos para una caries. Si siente dolor durante un tratamiento de conducto o cualquier otro procedimiento, avísele a su dentista.